miércoles, 11 de febrero de 2009

SIERRA NEVADA - POQUEIRA

Excursión a la que asistimos un nutrido grupo formado por (de izquierda a derecha) Paco Ramos, Juanxo, Bocaillo, Beren, Juan Pablo, Carlos, Shorba y Soria. 

Comenzamos la andadura llegando al punto de partida junto a la central eléctrica de Capileira, a la cual no pudimos acceder pues encontramos a unos trabajadores de sevillana que nos recomendaron que no bajáramos los vehículos hasta el punto de salida previsto a causa del hielo acumulado en la pista. Quizás el hecho de que viniesen remolcando un turismo con su land rover nos animo a dejar nuestros coches varios kilómetros antes en previsión del mal estado del vial.


Comenzamos enérgicamente la subida por el río Naute, sendero recomendado por el guarda del refugio, que para nuestro gusto y con el material que llevábamos se nos hizo interminable por el desnivel acumulado desde la central hasta el mismo. Eso sí, el valle precioso y el refugio aun viéndose cercano engaña en la distancia a recorrer, poco a poco y paso a paso vamos deshaciendo el sendero entre fotos bromas y bufadas de cansancio.



Cruzamos en varias ocasiones el río parando a almorzar antes de atacar la loma que nos llevaría finalmente al refugio.


Y por fin empezamos a encontrarnos lo primeros neveros en la cuesta que como su propio nombre indica "CUESTA" y además de verdad.


Conforme ascendemos tenemos cada vez mas posibilidades de admirar el maravilloso valle que nos rodea, y seguimos cuesta arriba!!!


Tras cruzar las acequias y dejarnos rodear por las nubes y con alguna que otra avanzadilla del grupo avistamos por fin, muy al final el esperado refugio donde por fin podemos disfrutar del merecido descanso del guerrero. Pedazo de subidón, cargados de material se hace agotador.


Comenzamos al día siguiente con ánimos de ascender a la cumbre de Mulhacen, todos preparados y dispuesto para atacar el camino, el día explendido que se nos abre nos da ánimos para tirar hacia arriba. En esta foto podéis ver el grupo integro antes de salir, pletóricos de energía.

Comenzamos bajando al río mulhacen que se encontraba totalmente cubierto de nieve, ni tan siquiera se veían sus cascadas ni su curso.


Y tras él, las cuestas arriba, de nuevo tenemos que esforzarnos aunque esta vez con menos peso pero sin olvidar que estamos a mas de 2500 metros sobre el nivel del mar, lo cual le da mayor aliciente a la subida.
Trazamos unos zig-zags para hacer menos pesadas las inclinaciones que muy oportunamente se nos cruzan en el camino.
Casi llegando al refugio empieza a hacerse visible la ventisca, el refugio de la caldera esta cerca y el día es perfecto climatológicamente hablando, por lo que continuamos adelante.
Aquí tenemos la cumbre de Mulhacen, arriba hace un viento que vuelas!!! Uf! creo que seria mejor no subir... a ver, a ver?
La cosa se pone movidita!!! lo que le da mas aventura al camino, el cansancio hace mella en nosotros, la nieve nos llega hasta mas arriba de las rodillas en la mayor parte del recorrido y tenemos que ir abriendo huella y eso cansa eh!
Por fin el esperado refugio, en el descansamos nos avituallamos y tomamos una difícil decisión debido al cansancio y sobre todo a la falta de tiempo tenemos que descender sin subir a la cumbre de Mulhacen que en principio era nuestro objetivo.
Así que recogemos y caminito de vuelta!!!

En la bajada se nos planto frente a nosotros un precioso mar de nubes que nos acompaño en todo el descenso maravillándonos hasta el refugio.

Y llegada al refugio cayendo la noche, algunos por ahorrarse unos eurillos se quedaron a dormir en otras condiciones, ja ja ja!!!.

Este es el refugio de poqueira, se cena genial y en esta salida con la gran cantidad de nieve que tiene a su alrededor está precioso.


El día de regreso se levanta de nuevo estupendo en lo que a climatología se refiere, temprano en la mañana y tras desayunar emprendemos el camino de vuelta a la central.
El descenso se hace mas liviano, todo cuesta abajo no es lo mismo, claro está.
El camino fue bajando de nuevo por las acequias hasta el río Naute y siguiendo su curso deshaciendo el camino otra vez hasta la central.
Largo camino hasta donde alcanza la vista en el valle donde poco a poco va desapareciendo la nieve que ayer nos acompañó abundantemente toda la subida.
Entre conversaciones y planteamientos de nuevas rutas de ataque al Mulhacén llegamos por fin a los coche que nos esperaban en el mismo lugar donde los dejamos, menos mal!
Quizás en esta ruta no hayamos coronado ninguna cumbre, pero en cierto modo no hay mejor cumbre en el mundo que la compañía de mis amigos y especialmente de mi padre al cual dedico estas sencillas pero sentidas palabras.
 Hasta la próxima!!!

1 comentario:

EL PRO dijo...

Este año no pude ir por que me puse malo. pero el año que viene tengo esta ruta pendiente con Paco Morales.