El acceso es una gran galería algo sucia, de tierra suelta, además de encontrarnos dos habitantes porcinos encamados a los que no les hizo mucha gracia que le molestásemos. Desde el mismo se observan varias galerías por una de las cuales observamos un transito continuo de murciélagos.
En lo mas profundo observamos una gatera que procedemos a explorar resultando esta ciega unos metros mas abajo.
Al regresar encontramos otro acceso q nos da paso a otro salón inclinado colmado de estalactitas muy deterioradas el cual al igual que el anterior contiene gran cantidad de murcielaguina.
Encontramos también un habitante inesperado que nos corto un poco el rollo en la ultima gatera, se trataba de una gran rata blanca que huyo despavorida al notar nuestra presencia.Quizás fuésemos nosotros potencialmente mas peligrosos que el pequeño roedor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario